UNA PRÓTESIS PARA MI PAPÁ PUEDE CAMINAR DE NUEVO.

El nombre de mi padre es José Rigoberto Gutiérrez Ninco de Armenia, Quindío, y es mi razón para pelear. Hace unos meses, después de varias pruebas con diagnósticos erróneos y retrasos, finalmente y desafortunadamente le diagnosticaron cáncer en la pierna izquierda (tumor maligno en huesos y cartílago), desafortunadamente ya estaba muy avanzado. Hemos estado en un proceso muy agotador tanto físico, mental y económico. Tiempo después del diagnóstico, nos dieron la desafortunada noticia de que tuvieron que amputarle la pierna izquierda completa con la desarticulación de la pelvis. Por dura que fuera la noticia, era la única opción para salvar su vida. Después de 5 horas de cirugía delicada y de alto riesgo, salió victorioso y tuvo un proceso de recuperación muy cuidadoso. Poco a poco se ha ido recuperando con la ayuda de Dios y el coraje que posee. Todavía hay un largo camino por recorrer sabiendo que esta etapa ha sido la más difícil de su vida, para mí también, ya que, como hijo único, soy responsable de mi padre, considerando que mi madre murió hace años también de Cáncer y que ya no puede trabajar en la ebanistería que era su profesión y sustento. En este momento, mi padre ya está un poco más estable, tratando de ser positivo y ver la situación de la mejor manera, pero su movilidad es extremadamente difícil. Tenemos una silla de ruedas que nos dieron, pero aun así, su movilidad sigue siendo demasiado complicada. Realmente me gustaría darle a mi padre una mejor calidad de vida sabiendo que tiene una discapacidad auditiva separada y que ahora es físico debido a la pérdida de su pierna. Por lo tanto, me gustaría obtener una prótesis que se adapte a nuestras necesidades, pero no tenemos los recursos financieros para esto. Le agradezco de antemano su atención y, si es posible, un poco de colaboración lo antes posible para finalmente poder comenzar con su rehabilitación.

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